Entre mis planes en este viaje a San Francisco, había una excursión que me hacía especial ilusión: visitar el famoso Muir Woods National Monument. Sin embargo, como a veces ocurre cuando viajamos, la naturaleza tenía otros planes para mí.
Muir Woods: Un bosque de ensueño #
Muir Woods es un lugar mágico, conocido por sus imponentes secuoyas costeras. Estos árboles gigantes, algunos con más de 1000 años de edad, crean un paisaje de cuento de hadas. El parque ofrece senderos bien mantenidos que serpentean entre estos colosos verdes, permitiendo a los visitantes sumergirse en la tranquilidad del bosque.
Además de las secuoyas, Muir Woods alberga una rica biodiversidad. Los visitantes pueden observar una variedad de plantas y animales, desde helechos y flores silvestres hasta ardillas, pájaros carpinteros y, con suerte, incluso algún ciervo. El parque también cuenta con un centro de visitantes donde se puede aprender más sobre la ecología e historia del lugar.
El desafío del transporte #
Visitar Muir Woods puede ser un reto logístico, especialmente en temporada baja y utilizando transporte público. Consciente de esto, investigué mis opciones y descubrí un servicio de autobús que operaba los domingos desde Sausalito hasta Muir Woods.
Con anticipación, reservé mi billete para el domingo 3 de febrero de 2019. El autobús saldría a las 10:30 AM desde la parada en Bay & Bridgeway, Sausalito. La reserva me costó $3.00 e incluía el viaje de ida y vuelta, con la flexibilidad de regresar en cualquier autobús durante el día.
Cuando la naturaleza decide #
Sin embargo, a mi llegada a San Francisco, me encontré con una situación inesperada. La ciudad y la bahía estaban bajo una alerta por fuertes lluvias y riesgo de inundaciones. Este temporal, que afectó a gran parte de California a principios de febrero de 2019, trajo consigo lluvias intensas, vientos fuertes y la amenaza de deslizamientos de tierra.
La tormenta, parte de un patrón climático conocido como "río atmosférico", causó estragos en toda la región. Se reportaron inundaciones en varias áreas, cortes de energía y cierres de carreteras. Las autoridades aconsejaron a residentes y turistas limitar los desplazamientos no esenciales.
Lo que no pudo ser #
Ante esta situación, y priorizando la seguridad, tuve que tomar la difícil decisión de cancelar mi visita a Muir Woods. Aunque fue decepcionante no poder explorar ese maravilloso bosque, entendí que la naturaleza a veces nos recuerda que ella marca el ritmo.
Esta experiencia me enseñó la importancia de la flexibilidad al viajar y cómo, a veces, los planes que no se concretan nos llevan a descubrir otras facetas inesperadas de nuestro destino. Aunque no pude caminar entre las secuoyas gigantes, tuve la oportunidad de experimentar San Francisco de una manera única, viendo cómo la ciudad lidiaba con las fuerzas de la naturaleza.
Quizás, en un futuro viaje, tendré la oportunidad de visitar Muir Woods y maravillarme con sus gigantes verdes. Mientras tanto, guardo esta experiencia como un recordatorio de que en los viajes, como en la vida, a veces lo más valioso son las historias que surgen de los planes que no pudieron ser.
Juanjo Marcos
Desarrollador y diseñador web actualmente afincado en Bilbao. Desde que tengo uso de razón viajar es una de mis grandes pasiones, junto a la tecnología, la fotografía y los largos paseos sin rumbo definido.
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